La energía ni se crea ni se destruye, nos enseñaban en clase, y este podría ser un buen ejemplo. Un bloque más o menos cúbico que se desprende desde una posición elevada y decide cambiar su energía potencial por energía cinética… arrasando todo lo que encuentra en su camino, que resulta ser una bodega.
Ocurrió en Tramin, Italia, en la región de las Dolomitas, el pasado 21 de enero a las 21 horas. Pulsando en la imagen o en este enlace podéis acceder a la noticia original, con más información y una galería fotográfica en la que se puede ver otro bloque que decide parar justo antes de la casa (¡¡ !!) y una vista general de la zona, con un bloque muy próximo al que ha caído ahora pero con señales de llevar allí bastante tiempo (4ª fotografía), vamos, que no es algo nuevo.
Como ya dije en el post del bloque desprendido en Taiwán, en este tipo de bloques, dado su elevado volumen, no cabe hablar de sistemas de protección o de «cunetas Ritchie«, resultando mucho más adecuado establecer un buen sistema de prevención, identificando, monitorizando y «saneando» los bloques sueltos, ya sea a mano, con explosivos o incluso mediante helicópteros.
Muchas gracias al Twitter del Grupo de Ingeniería del Terreno de la Universidad de Alicante por enviarme el enlace a la noticia.
Actualización: Pablo Nieto me envía el enlace a este impresionante vídeo grabado con un dron en el que se puede ver muy bien el punto de partida de los bloques. Gracias Pablo.