El gobierno quiere suprimir «algunos» colegios profesionales… pero no dice cuáles

El enfrentamiento entre los Colegios Profesionales y el gobierno con motivo de la famosa Ley Ómnibus y su liberalización de servicios no es nuevo. En 2008, la Comisión Nacional de la Competencia instaba a acabar con la colegiación obligatoria, hace unos días el Presidente del Gobierno volvía a sacar el tema afirmando que los Colegios Profesionales son “instituciones laborales con rigidez crónica” y, justamente ayer, volvíamos a tener noticias al respecto, por dos vías distintas, además:

No tengo nada en contra del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos (vale, la agenda que regalan me parece de chiste, pero ese es otro tema). Como profesional autónomo me gusta visar mis trabajos para contar con la protección del seguro y he de admitir que nunca he tenido el menor problema para hacerlo, al contrario, todo han sido facilidades.

El problema es otro, el problema es que el porcentaje de colegiados que visamos algo es ínfimo. Para el resto de colegiados, la gran mayoría, los que trabajan por cuenta ajena y no firman ni visan nada, el Colegio es sólo un gasto más y estarían encantados de quitárselo de encima, mientras que para los que trabajamos como autónomos, el visado es un Seguro de Responsabilidad Civil que, sin el colegio, no podríamos permitirnos.

¿Qué pasará si eliminan los colegios?

Nada, no pasará nada, absolutamente nada, mientras no toquen el fútbol en este país no pasará nada de nada… pero sin el respaldo legal del colegio se abre la veda para denunciar al ingeniero/arquitecto/lo-que-sea por cualquier cosa… y convendría que lo tuviéramos en cuenta, porque manejamos conceptos como «riesgo», «tolerancia», «periodo de retorno» y «factor de seguridad», y son conceptos que no siempre se entienden bien, fuera del sector.


Eduardo Alonso: «Las catástrofes y el progreso de la geotecnia»

He puesto ya por aquí dos discursos inaugurales de la Real Academia de Ingeniería, el de Aforismos Estructurales, de Javier Rui-Wamba (1998) y el de Uniones en Estructuras de Madera, de Ramón Argüelles (2010), creo que es hora de enlazar uno sobre geotecnia, el de Eduardo Alonso Pérez de Ágreda sobre Las Catástrofes y el Progreso de la Geotecnia del año 2005, todo un disfrute de lectura si, como a mi, te gustan la geotecnia y la historia a partes iguales.

Alonso, profesor en la ETSICCP de la UPC, disecciona de un modo notable tres paradigmas clásicos de la mecánica de suelos: la ley de resistencia a esfuerzo cortante de Coulomb (s. XVIII), el principio de tensiones efectivas de Terzaghi (~1936) y el modelo de estado crítico (~1968), aprovechando el recorrido histórico para estudiar algunas catástrofes (entendiendo por catástrofe algo no previsto) en las que estos tres paradigmas tienen algo que decir.

Los casos analizados son:

  • 1959 – La rotura de la presa bóveda de Malpasset (Francia)
  • 1963 – El desastre de Vaiont (Italia)
  • 1976 – La rotura de la presa de Teton (USA)
  • 1978 – El deslizamiento de Rissa (Noruega)
  • 1985-88 – La reactivación del deslizamiento de Cortes de Pallás (Valencia)
  • 1998 – La rotura de la presa de Aznalcóllar (Sevilla)
  • y los asientos diferidos de la catedral de México y la Torre de Pisa.

Deslizamiento de Cortes de Pallás, Valencia Vista aérea del deslizamiento de Cortes de Pallás, Valencia (Iberpix)

Las catástrofes y el progreso de la geotecnia. Eduardo AlonsoLas Catástrofes y el Progreso de la Geotecnia. Eduardo Alonso [pdf – 1,48 MB]

 

Como único aspecto negativo hay que decir que la calidad de las imágenes deja bastante que desear, como también le ocurría al discurso de Javier Rui-Wamba, ¿es el precio a pagar por disponer del documento gratis o quizá sólo un simple error a la hora de compilar el pdf?, ni idea, pero si alguien está interesado, también puede comprarlo en papel.


Ranking de Universidades, ¿de verdad estamos tan mal?

Hay muchas clasificaciones académicas de universidades y todas ellas son discutibles, tanto en criterios como en planteamientos (sean o no bibliométricos).

El pasado 13 de agosto Francis (th)E mule Science’s News adelantaba cambios en el Ranking Mundial de Universidades que establece el Times Higher Education, de próxima publicación. Sólo un día después se publicaba otro ranking, el Academic Ranking of World Universities 2010 (ARWU) que publica la Shanghai Jiao Tong University.

El ranking ARWU ha sido desastroso para las universidades españolas. La primera en aparecer, la Autónoma de Madrid, lo hace en la posición 201, y hay quien habla ya de fracaso mundial.

No estoy de acuerdo con esa definición, más que nada porque fracasar implica haberlo intentado, y no creo que sea ese el caso. Uno de los análisis más acertados que he visto al respecto es el que hacen en Amazings, y es que el problema no es salir mejor o peor situado en ese ranking, el problema es que jugamos en otra liga, con otras reglas y otros jugadores, y así difícilmente vamos a poder clasificarnos nunca.
Teniendo en cuenta el sistema español, a saber, democracia mal entendida, meritocracia nula, universidades por doquier, vistas por la sociedad como «fábricas de parados» y bajo la demagogia barata de siempre, además… ¿vale la pena hacer el esfuerzo de tener una universidad entre las mejores del mundo?

En mi opinión si, tener una entre las 100 primeras no estaría nada mal, crearía un efecto llamada, y eso siempre es positivo (por no mencionar que los países de nuestro entorno europeo las tienen). El problema es ¿qué universidad?, porque tendremos que elegir una a la que proporcionar fondos y ayudas, ¿no?, una universidad a la que la gente quiera ir, por prestigio y preparación, en lugar de estudiar en la que caiga más cerca de casa.

Todavía mejor, deberían ser dos. Los detractores de este tipo de universidades dicen que son elitistas, así que lo mejor sería apoyar dos universidades, de forma que se generara competencia y afán de superación.

Bien, apoyamos dos universidades entonces, ¿bajo qué criterios…?

Pues seguramente los que ya ha decidido el gobierno, recomiendo leer esta interesante charla (no consta fecha o yo no la encuentro) de QUO entre Juan Luis Arsuaga y nuestra actual ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, en la que ésta asegura que, gracias al plan Estrategia Universidad 2015, España tendrá 2 universidades entre las 50 mejores del mundo en el año 2015…

Por supuesto, la Ministra no es tonta y sabe perfectamente que, para entonces, ya será problema de otro, por no mencionar que, mientras tanto, es muy probable que se saquen de la chistera otra Ley Orgánica de Universidades o de Investigación o similar, ¿será por leyes…?

«Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes» le dijo Yoda a Luke, y más nos valdría hacer caso del consejo. Si no estamos dispuestos a hacerlo, apliquemos el sentido común y dejemos ese anhelo para días mejores, no están los tiempos ahora para tirar el dinero intentándolo, y menos teniendo en cuenta que uno de los criterios es que los egresados consigan trabajo…

Si has llegado hasta aquí y eres profesor asociado no mires este enlace, so pena de cabrearte mucho.

Charla sobre Cimentaciones Singulares en la Universidad de Alicante. Julio 2010

No sé si alguno de los lectores estuvo presente la semana pasada en el Curso de Verano sobre Actuaciones Geotécnicas Singulares que se celebró en la Universidad de Alicante, pero de ser así espero que no se durmiera le gustara la charla que di el jueves 29 sobre Cimentaciones Singulares.

Al final, visto lo que tenía pensado contar el conferenciante que hablaba justo antes que yo, decidí no poner ninguna ecuación y hacer mi exposición lo más «ligera» posible. Creo que fue una decisión acertada aunque, bueno, en mi caso y con el tema que yo tenía, era fácil hacerlo, si me hubiera tocado a mi hablar sobre Cimentaciones en Roca no sé si hubiera quedado alguien despierto en la sala, la verdad.

La mayor parte del público asistente, como era de esperar, estaba formado por estudiantes (de Caminos, Ingeniería Geológica y Obras Públicas, sobre todo) en busca de créditos de libre opción y algo relacionado con sus estudios. Estaban allí cuando podían estar en la playa, y es algo de agradecer. Algunos incluso tomaron apuntes, espero que fuera por interés y no para evitar dormirse.

Los valientes y dispuestos organizadores del evento ya han confirmado que el año que viene habrá otro curso relacionado con la geotecnia, aunque todavía no han decidido sobre qué temática. Conforme se vaya aclarando el misterio lo iré contando por aquí para darle más publicidad.

Ah, por si alguien se lo está preguntando… si, dormí a una persona (sólo una, que yo sepa), y no era del público, precisamente.

Fomento hace público el Comité de Expertos para el Túnel de la Sagrada Familia

Y, de repente, todos los Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos se han transmutado en Ingenieros Civiles

Comité de Expertos para el Túnel de la Sagrada Familia

El Ministerio de Fomento ha hecho pública la relación de expertos [pdf] que se va a encargar de estudiar el túnel del AVE bajo la Sagrada Familia de Barcelona, todos ellos nombres conocidos de la profesión que, curiosamente, parecen haber cambiado de titulación en estas últimas semanas. Hay que ver cuanto «Ingeniero Civil» ha aparecido de repente.

  • Rolf Katzembach (Doctor y Máster en Ingeniería Civil y profesor en la Universidad Técnica de Darmstadt, Alemania)
  • Mathias Vogler (Doctor y Máster en Ingeniería Civil por la Universidad de Darmstadt, Alemania, y miembro de la International Society for Soil Mechanics and Geotechnical Engineering y de la International Tunnelling Association)
  • Pere Roca (Doctor en Ingeniería Civil, miembro de Icomos y profesor de Métodos de Construcción en la Universidad Politécnica de Catalunya)
  • Wolfram Jäger (Doctor en Ingeniería Civil)
  • Felipe Mendaña (Doctor en Ingeniería Civil, Universidad de Madrid)
  • José Gómez Cabrera (ingeniero de Minas y experto en túneles)
  • Raúl Rodríguez (ingeniero civil, director del área de Rehabilitación y Patología de Intemac)
  • Justo Díaz Lozano (ingeniero civil, director de la división de Diseño de Proyectos de Intemac)
  • Daniel Arias (decano de la Facultad de Geología de la Universidad de Oviedo)
  • Eduardo Alonso Pérez de Ágreda (Doctor en Ingeniería Civil, profesor de Ingeniería Geotécnica en la UPC y miembro de la Real Academia de Ingeniería de España)
  • Alberto Ledesma (Doctor en Ingeniería Civil, profesor de Ingeniería Geotécnica en la UPC)
  • Ángel Aparicio (Doctor en Ingeniería Civil, profesor del departamento de Estructuras en la Universidad Politécnica de Catalunya)
  • Gonzalo Ramos (Doctor en Ingeniería Civil, profesor de Métodos de Construcción en la UPC)
  • Manuel Valdés (ingeniero civil, director de Infraestructuras del Ayuntamiento de Barcelona)
  • Antoni Gens (Doctor en Mecánica de Suelos, profesor del departamento de Tierras y Cartografía en la UPC)
  • Johan W. Bosch (ingeniero civil, profesor del departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Delft, Holanda)
  • Robert Mair (Doctor en Ingeniería Civil, profesor de Ingeniería Geotécnica en la Universidad de Cambridge, Reino Unido, y jefe del departamento de Ingeniería Civil y Medioambiental)
  • Alfred Haak (Doctor en Ingeniería Civil, miembro del comité de STUVA)
  • Markus Thewes (Doctor en Ingeniería Civil, Universidad de Wuppertal, Alemania)
  • Xavier Flores (ingeniero civil, director general de Infraestructuras, Departamento de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat de Catalunya)
  • Rafael Rodríguez (ingeniero civil, director de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa, Adif).
Lo dicho, ¿qué ha sido de la carrera de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, a la que pertenecen casi todos los integrantes españoles del comité?

¿Es un error del ADIF?

¿Es un error del Ministerio de Fomento?

¿Se ha aplicado la Ley Bolonia con retroactividad?

Es de suponer que se ha escrito así porque en inglés se dice «Civil Engineering» pero quien sea que haya redactado la nota se ha lucido porque, legalmente, la Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos y la Ingeniería Civil no son lo mismo…

Por cierto, un día de estos deberíamos empezar a plantearnos el cambio de denominación del título si queremos ser competitivos en el exterior, porque lo de «Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos» queda muy bien entre Portugal, Andorra y Gibraltar, pero fuera de ese contorno se usa «Ingeniero Civil», y eso nos va a pasar factura, más pronto o más tarde…